Estamos en verano en Medellín, sol, cielo azul, poca lluvia. La ciudad se ilumina con estos árboles de flores amarillas…los Guayacanes!!! Cuando salgo de mi apartamento todos los días, veo el nuestro. Es un privilegio tener un Guayacán en nuestros edificios y este año ya floreció, sus flores son una celebración amarilla, llena de vida. Grande, imponente y orgulloso árbol.
Salgo en mi carro y en la esquina, se asoman ramas llenas de flores amarillas, también la calle parece un tapete de flores, me siento feliz, mis ojos se iluminan, me emociono y digo en voz alta…hmmm pechocho!!! Y me rio sola jiji.
Es maravilloso vivir rodeada de tanta naturaleza, hace una semana observaba los Llarumos subiendo al Retiro un pueblo cercano en el oriente. Los Llarumos son unos árboles que sobresalen en las montañas, porque tiene hojas muy grandes y en tonos casi plateados, son mis favoritos. Ese mismo día, conocí un pájaro carpintero, que hizo todo un despliegue en su nido….hermoso! Esta es mi tierra….
Dios, gracias por darme tantos regalos que me hacen feliz!