Beethoven

“La décima sinfonía” Joseph Gelinek. Este finde de puente, me dediqué a leer un libro, sin afanes, saboreando cada página, descubriendo como me hace feliz la lectura. Hace poco, un nuevo amigo dejó de asistir a una rumba, yo le pregunté a sus más amigos por que había faltado me cae bien y quería saludarlo. Entonces uno de sus amigos, me dijo que si lo llamaba y hablaba con él. Por supuesto le dije que si, y me pasó el celular. Mi nuevo amigo contestó, yo lo saludé y traté de convencerlo para que viniera a la rumba, pero este con mucha honestidad me contestó que estaba leyendo un libro! Charlando le dije, me cambias por un libro? Y el con mucha honestidad me contestó: “Si”, entonces reímos, pero yo sabía que había perdido la batalla y en el fondo lo entendía, porque yo también era así…

Me gustan las historias, los libros, los descubrimientos de nuevos mundos….esta semana, llegó a mis manos una novela de suspenso sobre la supuesta “Decima sinfonía de Beethoven”, bueno y como no se nada de música, lo reconozco, pues no sabía cómo medirmele a la lectura.

Cómo era puente y yo sólo quería descansar, me lancé, decidí dedicarme tiempo y disfrutar del libro. Cuando comencé a leer, me di cuenta evidentemente que soy la más ignorante en temas musicales e historia de la música, a medida que avanzaba un poco, hablaban de bemoles, corcheas, tonos, sinfonías…..un mundo ajeno a mi, entonces cuanto mas avanzaba con el libro, yo me sentía más intrigada. No me quedó más remedio que decidirme y parejo con la lectura, comencé a escuchar la Novena sinfonía, WOW que conexión pensé, me encanta esta experiencia. Luego otros capítulos y me decidí por la quinta sinfonía, entonces me sorprendía a mi misma redescubriendo que esas cancioncitas que tarareo, de vez en cuando, son partes de las sinfonías de Beethoveen y me emocioné, no estoy tan lejos de su música!

Pero, más tarde y cuando estaba a punto de terminar el libro, me hice la pregunta que siempre me hago y que hago a mis sobrinitos para que aprecien y recuerden lo mejor de cada una de nuestras aventuras, Que fue lo que más, lo que maaaaas te gustó? Y la respuesta fue un emocionante, fuerte y contundente tarareo en mi mente, la quinta sinfonía: TA TA TA TAAAAA!!!!!